Guasha – Jade verde

La técnica de gua sha es una práctica muy extendida en el oeste de Asia que consiste en tratar la piel con un objeto liso con el propósito de reactivar el flujo sanguíneo, tonificando la musculatura facial, prevenir la flacidez, atenuar arrugas y líneas de expresión, mejorando bolsas, ojeras y aportando a la piel luminosidad y relajación.

Es apto para todo tipo de pieles y todas las edades ya que es muy suave y nada agresivo.

Es muy sencillo de usar y utilizándolo a diario durante 5-10 minutos te aportará múltiples beneficios siendo lo ideal utilizarlo de noche con tu rutina facial ya que es cuando la piel se regenera.

Hay muchas teorías en torno a las propiedades curativas de las piedras en las que se cree en el jade verde como símbolo de sabiduría, serenidad y pureza. Se considera un mineral que favorece la armonía, la calma y el equilibrio mente-cuerpo además de proporcionar limpieza y protección.

Modo de empleo: Lava la cara y aplícate los productos cosméticos como lo hagas habitualmente, masajea la cara presionando un poco con dirección ascendente y de adentro hacia afuera empezando por el cuello, mentón, pómulos, ojos y por último la frente, favoreciendo así la reafirmación de la piel.

Propiedades: Favorece la circulación sanguínea, relaja los músculos, descongestionante, previene y mejora bolsas y ojeras, flacidez, arrugas, líneas de expresión…

Uso facial corporal.