El aceite vegetal de monoi de Tahití es un macerado con un agradable aroma dulce y floral, originario de Tahití y se elabora macerando 12 flores de tiaré (gardenia tahitensis) en 1 litro de aceite de coco.

Las mujeres tahitianas lo utilizan como mascarilla capilar además de sus usos cosméticos ya que posee propiedades hidratantes, calmantes, protectoras, reparadoras del daño solar, así como para aliviar las quemaduras. También es eficaz como cicatrizante en las picaduras de insectos.

Propiedades: regenerador, piel sensible, piel seca, picaduras, cicatrizante, hidratante, buen aroma, protector solar, calmante

Modo de empleo:  Como mascarilla capilar se utiliza poniendo una pequeña cantidad en el cabello media hora antes de lavarlo, dejarlo actuar y pasado ese tiempo lavar y aclarar con abundante agua.

Para el uso en la piel aplica una pequeña cantidad en el cuerpo que penetrará fácilmente y creará una capa protectora que hará que tu piel quede hidratada y suave.

Uso externo

No testado en animales

30ml